Síndrome Alcohólico Fetal y Método Katia Dolle®
¿Qué es el S.A.F o Síndrome alcohólico fetal?
Introducción
El Síndrome Alcohólico Fetal es un trastorno del desarrollo causado por la exposición del feto al alcohol durante el embarazo. Este Síndrome comparte algunas similitudes con el TDA/H, pero es en algunos casos mucho mas complejo y severo, afectando al correcto neurodesarrollo. Cuando la madre bebe alcohol durante el embarazo incluso si es de forma puntual, este será tan extremadamente tóxico que además de impedir la correcta formación de las neuronas, también producirá cambios morfológicos característicos.
Llevamos muchos años atendiendo casos de niños adoptados, a los que ayudamos a mejorar en su salud tanto física, emocional como mental. Según nuestra experiencia, muchos niños adoptados han pasado serias desnutriciones los primeros años de vida. Esto provoca que no haya cantidades suficientes de cofactores para sintetizar neurotransmisores, y tengan por ese motivo niveles de serotonina bajos, noradrenalina o dopamina. Por este motivo muchos de estos niños son muy impulsivos y no se concentran. La mala alimentación los primeros años de vida, el estrés, el abandono y la falta de estímulos, repercuten en el neurodesarrollo del niño. Suelen presentar problemas de adaptación al estrés, ansiedad desde leve a generalizada, muchos miedos, apego emocional y trastornos del ánimo. Ayudarlos desde su biología los ayuda a estabilizarlos, centrarlos y calmarlos. Muchos de estos niños tienen afectado el sistema inmune, siendo propensos a las dermatitis atópicas y las alergias, factores biológicos que también influyen en la capacidad de concentración. Otros tienen Síndrome Alcohólico Fetal en diversos grados, generalmente porque la madre biológica no contaba con quedar embarazada. El S.A.F. se origina en el primer trimestre.
La Fundación Katia Dolle por la calidad de vida
Si bien es cierto que la migración de las neuronas que debió realizarse en su día en el feto, no se puede corregir a posteriori, consideramos que un abordaje integral de la salud, y así nos lo demuestra la experiencia, puede reducir y suavizar las características de los niños con S.A.F, mejorando así sus habilidades cognitivas, sociales y reduciendo su nivel de dispersión, atendiendo otros factores biológicos desde la PNIE que agravan o agudizan el cuadro. Los niños que además han sido adoptados, con mayor motivo aún se beneficiarán del Método Katia Dolle en su más amplio sentido, de salud y de neurodesarrollo.
Cambios morfológicos y otras caracterísitcas en S.A.F
- Aplanamiento del espacio entre nariz y labio superior
- Labio superior fino
- Nariz corta
- Epicantos de los ojos con pliegues
- Frente estrecha
- Cabeza pequeña
- Talla baja
- Bajo peso
- Daño cerebral
- Lesión de las neuronas
- Problemas cardíacos
Características cognitivas en el Síndrome Alcohólico fetal
Los niños con SAF se consideran niños generalmente difíciles, especialmente por sus características cognitivas:
- Cae siempre en los mismos errores. Esta es una característica común que provoca que la educación y la convivencia resulten a veces complicadas. En adultos es frecuente lo lograr corregirse en diversos ámbitos, especialmente en su tendencia a «tener la mano rota» con la economía y finanzas. En los niños resulta difícil educar, ya que por más que se les llama la atención de ciertos errores o conductas inadecuadas, lo logran corregirse para frustración del niño y de los padres.
- Mal control de las emociones. Suelen ser imprevisibles, ciclotimicos y emocionalmente descontrolados y muy intensos.
- Dispersión. Son muy dispersos, tienen una alta tendencia a perder cosas, al caos, la desorganización y el desorden.
- Déficit de atención. Su inteligencia no tiene porqué estar deteriorada( algunos pueden tener una inteligencia destacada), aunque si en los casos más graves, pero su característica mayor es el déficit de atención, especialmente relacionado con la dispersión.
- Problemas con las rutinas. Las rutinas son para estas personas un obstáculo casi insalvable, es difícil que logren atenerse a ellas, seguir rutinas cotidianas simples por su dispersión y tendencia al caos y altibajos emocionales.
Daño del sistema nervioso central en S.A.F
En todo Síndrome Alcohólico fetal habrá modificaciones en el sistema nervioso. Es cierto que el diagnóstico es complejo, ya que en casos leves los rasgos morfológicos pueden no ser demasiado evidentes. El daño en el sitema nervioso se puede valorar en tres áreas:
Anatomia cerebral
La estructura anatómica del sistema nervioso: cerebro pequeño (microcefalia) o anomalías en la formación del cerebro, ventrículos, etc.
Funcionamiento neurológico
El funcionamiento neurológico: afectación de las habilidades motoras, problemas visuales, mala coordinación entre la vista y la manipulación, torpeza, caídas, etc.
Funcionamiento intelectual
trastornos del comportamiento, agresividad, falta de autocontrol , de atención e hiperactividad, retraso mental, problemas de aprendizaje, problemas de integración social, gastos compusivos,etc.
NIVELES DE GRAVEDAD EN SÍNDROME ALCOHÓLICO FETAL
Clasificación somera de los diferentes grados de afectación, en niños a causa de consumo de alcohol, en orden de mayor a menor gravedad:
- S.A.F. Presencia de anomalías faciales, retraso de crecimiento y evidencia de daño cerebral en un recién nacido o un niño con o sin exposición prenatal al alcohol confirmada
SAF parcial No se cumplen todos los criterios de SAF. Normalmente falta el retraso de crecimiento.
Defectos congénitos relacionados con el alcohol (ARBD) Presencia de anomalías físicas y otras malformaciones orgánicas relacionadas con el alcohol, por ejemplo: defectos cardíacos, malformaciones renales, problemas oculares, trastornos musculo-esqueléticos, etc.
Trastorno del neurodesarrollo relacionado con el alcohol (ARND) Clínica neurológica y neuropsicológica sugestiva de exposición prenatal al alcohol. No hay presencia de anomalías físicas ni retraso en el crecimiento, pero hay problemas que sugieren un neurodesarrollo anormal.
TDAH Y SAF, SIMILITUDES Y DIFERENCIAS
El diagnóstico de SAF se puede confundir con el del TDAH, ya que estos dos trastornos pueden afectar a las mismas áreas neuropsicológicas del niño: rendimiento intelectual global, funcionamiento ejecutivo, aprendizaje, memoria, razonamiento visoespacial, regulación del comportamiento, atención, control de los impulsos, dificultades en la interacción social, etc.
Será importante que evaluemos al niño con un profesional experto en el tema porque un diagnóstico erróneo nos llevaría a darle un tratamiento menos efectivo al niño afectad@. En casos en los que es posible hablar con la madre biológica, este diagnóstico será más fácil, pero en casos de niños adoptados, esto puede ser un diagnóstico complicado. Algunos de los rasgos diferenciales importantes son los siguientes:
En SAF y TEAF hay tasas más altas de problemas de comportamiento social que resultan de dificultades en la cognición social, el procesamiento emocional, etc. y también puede haber más problemas concernientes con la sobreestimulación que en TDAH. En este último hay más dificultad en concentración y atención sostenida que en TEAF y SAF.
En conclusión, en los niños con TDAH deben tenerse muy presentes los antecedentes personales maternos de ingesta de alcohol en el embarazo, con especial relevancia en niños adoptados procedentes de los países del este europeo. El proceso diagnóstico de valoración clínica y pruebas neuropsicológicas es muy similar entre niños con SAF y TDAH, y algunas pautas de intervención son similares, pero, los niños con TEAF/SAF pueden no presentar mejoras, incluso empeorar y reaccionar con mayores problemas conductuales cuando se les administra una medicación para TDAH, siendo por ello preciso realizar a una oportuna valoración neuropediátrica y diagnóstico diferencial en todos los niños y niñas con sospecha de TDAH.